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Ritidoplastia


Intervención para mejorar el exceso de piel, reposiciona los tejidos a nivel de las mejillas y sobre el borde mandibular. Usualmente se combina con el tratamiento de la región cervical para mejorar de forma uniforme la cara y el cuello.
Introducción
El proceso de envejecimiento en la cara se da a tres niveles. Formación de manchas en la piel con arrugas superficiales, atrofia de los tejidos blandos con pérdida de volumen y laxitud de los tejidos profundos. La ritidoplastia es la intervención que nos permite corregir la caída de los tejidos de la mejilla que llevan a un mayor pronunciamento de los surcos alrededor de la boca, abultamiento de piel a nivel del borde mandibular, y de acuerdo al caso, al combinarse con una cervicoplastia (cirugía de las arrugas del cuello), se puede corregir la formación de bandas a nivel del cuello y mejorar el ángulo entre la mandibula y el cuello.  Dado las características de envejecimiento mencionadas, la ritidoplastia se suele combinar con otras intervenciones como rellenos faciales (acido hialurónico o injertos de grasa –lipoinjertos), peeling, fotorejuvenecimiento, o toxina botulinica.
Cómo es la cirugía?
El procedimiento podrá realizarse con anestesia local más sedación o bajo anestesia general. Se realiza una herida alrededor de la patilla que puede extenderse alrededor de la oreja según la necesidad del caso. A través de esta herida se tiene acceso para reposicionar las tejidos de la mejilla. De acuerdo a lo que se planee para el tratamiento del cuello se procede igualmente a realizar liposucción de la región cervical o tratamiento de las bandas del cuello según se necesite. Luego de coagular los vasos sangrantes se reacomodará la piel y resecará la parte sobrante. Finalmente se cerrarán las heridas con sutura dejando antes unos tubos a salir por detrás de la oreja que servirán como drenaje de líquido.
Después de la cirugía?
De acuerdo a la extensión del procedimiento, este se realizará de forma ambulatoria u hospitalaria. El paciente saldrá con un vendaje y unos drenes que se retiraran en el transcurso de la primera semana. Se recomienda reposo los dos a tres primeros días, aplicar hielo y dormir con la cabecera elevada para disminuir la hinchazón. Luego de una semana se retiraran los puntos. Es normal la presencia de hinchazón y morados los cuales disminuirán con el paso de los días. La actividad normal se restablecerá de 3 a 4 semanas. La cicatriz se localizará alrededor de la patilla y de la oreja según la necesidad del procedimiento. Esta cicatriz presentará cambios con el tiempo y generalmente pasa desapercibida. En ocasiones puede ensancharse para lo que se puede realizar una revisión. La hinchazón se resolvera casi completamente en 2 a 3 meses.

Para mayor información sobre las diferentes intervenciones y analizar su caso en especial solicite una consulta de valoración personalizada.

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